David Pielfort

En Moguer tuve también la oportunidad de conocer a David Pielfort. No se molesten en buscar enlaces. David no vive en la Red, pero está muy bien vivo en el llamado mundo real. David es el verdadero rayo sanluqueño y sus poemas son formal y temáticamente atrevidos, recuperando una línea expresiva que enlaza con el postismo y las vanguardias, línea marginada en la poesía peninsular, aplastada en los últimos tiempos por un coloquialismo ramplón, de taller literario, y por búsquedas más o menos iniciáticas de espacios virginales e "inefables". David es para verlo en directo creando poemas a la vez que los lee, con una espontaneidad vanguardista que yo creía simplemente desaparecida. Los poemas de David que se han visto sujetos ya a la letra impresa me parece que no alcanzan la intensidad, la burlona rabia que sentí como un taponazo en la boca cuando le escuché leer en Moguer. Parece que está próximo a publicarse su primer libro "Maricón en tierra", que promete. En todo caso,mientras, aquí van dos botones de muestra:

Dos poemas de David Pielfort

EL SONETO DEL CORRER DE UNA CINTA DE CASETE VIRGEN

a alto volumen
es como estar sentado en un Oldmobile
viendo la tormenta
sobre el paseo marítimo

Pasa el barco mercante
de la línea Pinillos
no tengo ninguna cinta de ABBA
no tengo ninguna cinta de ABBA
ningún reproductor de CDE
ningún reproductor de CDE

EN DIRECCIÓN AL MOSTRADOR

Ella, con los codos en la formica,
creyendo en la luna -como los bichos en la luz-
rota y rota con su mirada
el falso reflejo de forleidi.
Las sanguijuelas huecas de la formica
le han jugado una mala broma marmórea:
la ilusión de darle vueltas a las cosas
al mirar por la lupa del poso de anís seco.

Alzando el pecho
estruja a tres, incorporándose.

La puta golea a la alameda
y Hércules sacude su alpargata, salpicada
por el meao de un perro, un guardia jurado